miércoles, 30 de marzo de 2011

Esta montaña no quiere…

No quiere que la suba una vez más… por lo menos no en ésta ocasión.

Dicen que las montañas hablan a quienes pretenden alcanzar sus cimas y que mientras hablan, deciden si se les corona o no.

El montañero ha de ser cauto y poner toda la atención posible para escucharla.

Esta montaña mía, ésta que por ahora y en ésta ocasión no quiere, se llama DLD Sueca.

Y aunque no siempre soy de los de oído fino, ésta vez la he escuchado con total claridad.
-Roto no, ven débil, ven fuerte, como quieras, pero roto no-

Son casi dos semanas haciendo todo lo posible por encontrar una forma, una posibilidad de estar en la salida… estar en la salida, mi mejor premio, al fin y al cabo.

Estoy tranquilo, sereno y demasiado avergonzado.

Tranquilo y sereno porque nada pierdo de valor. El valor allí lo tienen los amigos, los organizadores que tan bien me han tratado siempre, amigos ya desde hace dos años; lo tienen los compañeros que éste año irán a correr “eso que el murciano hace cada año”; lo tienen esos que conozco de otras ocasiones y a los que no conozco y me hablan de saludar, Ferran, Matola… (buscaremos otra ocasión)… todas éstas cosas válidas, si que me las pierdo, de momento… pero ni siquiera esto es lo importante.

Demasiado avergonzado.

Para seguir dando a entender que me quejo, que lo paso mal o simplemente que estoy algo desilusionado. Nada de eso.

No me gustan los días nublados y cuando escribí la entrada anterior, el sol no acababa de salir, un mal día y nada más.

Tengo montones de razones para sentirme afortunado y pocas, muy pocas reales y verdaderas para no hacerlo.

Mirar así, hacia delante, es la razón última de haber conseguido cosas que nunca imaginé hacer, por eso y solo por eso, me averguenza quejarme si la razón no es realmente importante, y ésta no lo es. Si corro o no, si tengo una lesión o dos, qué más da.

Cada día es un regalo, un premio que se me da… no sé muy bien por qué. Hacer lo que quiero y como quiero es ya… como la guinda final.

La entrada anterior la escribí justo antes de conocer la historia de Arturo Escribano, un joven deportista que hasta hace pocos días, escribía en su blog el difícil y lento… a veces demasiado rápido, paso de los días. Nos ha dejado. Se ha ido y como tantas otras veces, por desgracia, deberíamos ser capaces de convertir esa injusticia en algo útil, aunque solo sea para y por nosotros mismos.

La importancia de las cosas y su valía, hoy es todo y mañana no vale nada.

Yo debería tener la lección bien aprendida, tanto o más como el que más…

Y no siempre lo consigo; acabo dejando que éste o aquel propósito deportivo, sea quien dictamine si debo o no ser feliz. Esto no puede ser, no debe ser. No es justo y mucho menos moral, teniendo en cuenta que siempre hay alguien que lo está pasando mal, pero mal de verdad.

No sé si se me escuchará cuando lo diga, pero lo voy a intentar gritando: SOY FELIZ, maldita sea¡¡¡ lo soy, estoy vivo.

Tengo ganas de que llegue el día en el que no tenga que volver a repetírmelo para creerlo.

A todos, nos vemos en la próxima o en la siguiente, pero nos vemos.

miércoles, 23 de marzo de 2011

No importa cuántos golpes des, sino cuántos puedes recibir…

Qué bonita es la ignorancia, cuando aún no sabes la que te va a caer. Foto de Festak.com.

Pues tampoco hace tanto tiempo de aquello a lo que yo llamaba fortaleza. Fortaleza, fuerza o aptitudes para hacer más y más rápido que otros o al menos que yo mismo el día anterior.

Apenas hace unos años, era capaz de competir en medio de una semana de carga, de esas que te dejan las piernas doloridas por una temporada y la cara te queda desencajada,  chupada y/o urizada.

Eso ya pasó, y pretender cosas así, ya no me trae más que malas consecuencias. Hay que elegir, entrenar mucho o competir, pero no ambas cosas… yo al menos, he de hacerlo así.

Tras el Trail de Cabo de Gata, las juanjoampollas que me salieron en ambos pies, me tuvieron cinco días subido al rodillo, pero sin poder dar un paso con las zapatillas.

Una vez curadas y con una semana entera por delante, aparte de ciclismo, la carrera se hacía imprescindible y necesaria.
Me creí fuerte, poderoso, me ví apto para lo que ya no soy tanto, y es para recuperar... los años son así, te dan a la vez que te quitan, y tienes que estar atento para saber en todo momento, cuanto ha sumado o restado en tu interior.
No tuve buen oido, ni vista, ni olfato.

DUATLON OÑATI. Campeonato de Euskadi de Distancia Corta.

Al final de esta semana, llegó una cita que esperaba desde hacía meses, el Duatlón de Oñati, en Guipúzkoa, sobre la distancia de 10-40-5.

Me habían hablado y avisado de lo que suponía correr allí, y ni con esas… un plantel de lujo, una participación numerosísima (casi 400 en la salida) y un ambiente increíble, que al menos yo, nunca había visto en un duatlón.

Negro, negro por fuera, negro por dentro, negro. Foto cortesía de Juankar.

Ya de salida, sentí que no iba bien, corría todo lo que podía sin pensar en lo que quedaba,  porque esa misma impresión me daba al ver al resto de participantes, a un ritmo de 3'36''/km los diez kilómetros . Pensé entonces, que una vez en la bici, en mi sector preferido, iría mejor… y no, tampoco.
Saliendo de boxes. Foto de Festak.com.

Una carrera extraña para mí, acostumbrado a salir a darlo todo tirando, atacando, acoplándome… pues no, nada de eso.

Comienzo del 2º suplicio. Foto cortesía de Juankar.

En un grupo grande, sin posibilidad de tirar y “pasándolas canutas” en cada repecho… y sobre todo en cada puerto.

Intentando aguantar el ritmo impuesto por mi compañero Raúl Gómez. Foto de Festak.com.

Una vez bajé de la bici, ya dí por bueno todo el sufrimiento y penuria, pues esas fueron las dos sensaciones que tuve, y me alegré porque ya, podría correr otros cinco kms y terminar por fin aquello… pero no, tampoco.

Nada más salir, el abductor se me queda hecho una piedra y el gemelo también… -no tengo barrenos para tanta roca-, pensé… y otra vez arrastrando pierna... estirando… un km así y retirada obligada.

Solo después de una caida, hay una cosa que me enoja y me produce más frustración que otras, y es quitarle los imperdibles al dorsal antes de tiempo… me resulta hasta doloroso.

100 mts antes de retirarme. Foto Festak.com..

Hacerlo mejor o peor de lo esperado, son cosas que sé llevar bien, pero no terminar… es algo que, aunque anímicamente llevo mejor que antes, me sigue costando mucho tragar.

Fue para bien, lo sé. Una contractura forzada puedes dejarla en rotura de fibras por poco que te esmeres…
Cinco días después, este tema no ha mejorado lo más mínimo y aunque intento mantener fría la mente, veo el DLD de Sueca a diez días vista y muchos nubarrones negros sobre mi cabeza…

Acabo de decirlo en voz alta a quien siempre me aguanta: “ni soy de hierro ni de piedra, y éste invierno, tanta sarna ya me cansa…”.

-No importa cuantos golpes des, sino cuántos puedes recibir… -

Foto de "por ahí.."
A ver si la salud me da una tregua y me convalida un golpe no dado por uno no recibido, que yo soy mucho más pacífico de lo que parezco.

viernes, 11 de marzo de 2011

Y volvió el viejo duatleta.


".Me dicen, también, que me pase a los largos... pero yo no tengo tiempo, ni ganas... ni edad para tener... ganas de buscar tiempo".
El viejo duatleta, es más joven que yo. Se apartó del mundo de las transiciones y volvió casi una decena de años después. Imaginé mientras le veía, que mis ojos eran los suyos, y pensé como él:

- "Hace unas pocas semanas que le quité el polvo a la bici. He tenido que cambiarle las cubiertas y las cámaras a las ruedas, estaban cocidas.

¡Vaya! no me acordaba ya de lo bonita que es.

De aluminio, aluminio del bueno -me dijeron-... también debería haberle cambiado la cinta del manillar, pero bueno, eso ya para más adelante, si me vuelvo a enganchar...

Hace años que no compito, muchos años ya. En fin, esto es lo de siempre... correr, pedalear y correr otra vez.

Y aquí estoy, a pocos minutos de empezar... y estoy asombrado, nunca había visto tanta gente haciendo cola para dejar su bici en boxes... llevo diez minutos aquí y esto no avanza, no me dará tiempo a calentar un poco antes de salir... y encima me estoy meando, ....yo corría bien por aquel entonces, algo me quedará de aquello, aunque aquí parecen buenos todos.

En bici ya será otra cosa, me dicen que ahora es como una carrera ciclista, que se puede ir a rueda de los demás y todo. No me gusta, ya no es solo mi esfuerzo frente al de los demás... y no sé ir a rueda casi. Para dos días que salgo a entrenarme, como mucho me uno a dos o tres más, pero nunca en grupos numerosos, me da miedo... pero qué se le va a hacer, ahora toca esto.

Me dicen, también, que me pase a los largos, pero yo no tengo tiempo, ni ganas... ni edad para tener... ganas de buscar tiempo.

Estos dos de al lado, no paran de mirarme, a mí y a mi bici.

No es que me molesten, pero les veo con cara de extrañeza. Adivino que es por mis pintas y por mi bici... bueno, por mi bici no, mi bici es bonita de verdad, de aluminio, aluminio del bueno -me dijeron-.

Ahora que lo pienso mientras miro a mi alrededor, a ver si no me van a dejar correr por no llevar la bici en condiciones?...la mía se parece bien poco a todo lo que veo.

las que me rodean tienen ruedas con una apariencia de pesadas increible (sinceramente, me desmoralizaría llevar eso), las llantas son enormes y los radios cortísimos... y poquísimos además... de carbono... de carbono los cuadros, los manillares, las potencias, las tijas... en fin, mi bici... mi bici es de aluminio...

Me ha parecido ver entre estos al mismísimo Lance Armstrong, y si no era él, se le parecía una barbaridad, gafas, casco, bici... todo igual, pero no creo... no, no creo.

Mi casco no tiene apenas agujeros de ventilación, ni esa cosa rara por detrás que parece sujetarles la colleja a estos.

No llevo gafas y mi maillot ciclista y culotte del Banesto, tampoco están tan feos, digo yo... aunque no paran de mirarme. Ellos no se habrán visto, pero desde luego, si para correr un duatlón de una hora y poco me tengo que meter en un condón gigante... me parece a mí que igual que he venido me voy.

La espera se hace larga, y me da tiempo, mientras avanzamos lentamente hacia la entrada de boxes, a escuchar un poco a los "encondonados" hablando entre sí... aunque no les entiendo demasiado, la verdad.

Hablan de entrenes... deduzco que son entrenamientos, pero vamos, que si ya a la palabreja le tienen que quitar sílabas, no quiero ni pensar en que se quedarán los susodichos "entrenes"...

-Uno dice-: "¿cómo llevas el taper para el nacional?"
-a lo que el otro contesta- "¿pues así, así, un día fartlek y otro con ejercicios isométricos e incluso pliométricos, que me han dicho que van de lujo... jo!!, pero no veas, si no fuese por la carnitina, la glutamina los aminoácidos y el magnesio, no sé yo si llegaba... pero y tú, qué tal?" pregunta..

y este contesta: "no, yo más o menos bien, es en la bici donde tengo dudas, el powerplin, me dio una media el martes en el minuto 36 del entrene, que me tiene mosqueado, tengo que hacerme una analítica ya mismo a ver que pasa, yo pensaba que tenía más potencia aeróbica y resulta que de anaeróbica ando bien, pero de VO2 me han dicho que tengo que mejorar"

¡Vaya hombre!, le dice el amigo con cara de entendido que no se ha enterado de nada..., al tiempo que le comenta: ¡joder qué guapas están esas gafas en blanco! ¿donde te las has pillado?.

¡Chulas eeeeh?¡ En internet y, por supuesto, en London City. Quieres unas???

 
"Que mis pedales lleven correas aún, no es porque no conozca los automáticos, es más, se los cambié ayer mismo por estos. Pero con estos no tengo que cambiarme de zapatillas, lo haré todo con las mismas... (estos jóvenes no habrán caido aún en ése detalle de zorro viejo...) es chocante ver las bicis ya con las zapatillas dispuestas a apretar los pedales... sin dueño sobre ellas.

La mayoría, además, van atadas con elásticos a distintas partes de la bici... (¿cuánto tiempo habrán estado preparando todo esto?)

Ya me toca, el juez aún no me habla y ya me mira raro... querrá acordarse de mí y de cuando yo era uno de los punteros... seguro que se acuerda... anda, mírame bien y dame una alegría, que estas cosas reconfortan a uno.

"¡Así no puedes pasar!", -me dic
e con voz autoritaria-.

"¿Quéee? ¿por qué no?, -le contesto-.

a lo que me responde: "o le unes las puntas a los acoples y los dejas cortos que no sobrepasen la línea imaginaria de la punta de las manetas de los frenos.... o no pasas"!!.

Dios, no sé lo que ha dicho, pero yo se los quito directamente y ya está" pienso.

Y le digo a su señoría: "Bueno, entro y lo hago antes de salir, que llevo media hora haciendo cola..."

"¡No, ni hablar, te apartas y lo haces o no pasas!... y el dorsal? llevas puesto el dorsal?.. en la cinta, en la bici, en el casco??¡¡¡

Pues menos mal que llevo siempre mi allen del 5 encima y que vale casi para toda la bici, que si no...


Llamando para la salida y yo enseñando mi dni y toooodos los dorsales al juez otra vez.

Nunca había visto tanta bici junta, no me creo capaz de encontrar la mía cuando me toque cogerla...

Estudio el lugar, e intento recordar cada paso hasta mi flaquica, bastante bonita... pienso... a pesar de todo.

Dejo todo lo mejor posible y me voy rápido a la salida... llego tarde y me toca salir de los últimos y sin calentar, ni mear los nervios, ni nada de nada.

"Su señoría" levanta la mano con la pistola sin balas...(quiero pensar..)

¡¡¡PAMMM!!! -Disparo de salida-.

...Uf, menos mal... por fin terminó todo, ya me empezaba a sentir como un marciano en la Tierra.. o no, más bien como un terrícola entre marcianos. Se terminó el estrés, agobios y todas estas historias.

Estoy corriendo... ahora ya solo tengo que esforzarme...
¡Qué descanso más grande, madre mía!".

miércoles, 9 de marzo de 2011

Un día bueno, bonito y barato.

III TRAIL CABO DE GATA
Domingo 6 de marzo.
29,2 kms
400 marchadores. Salida 8:30 am
486 runners. Salida 10:00 am
Puesto: 4º
Puesto Cat. Vet: 2º
Tiempo: 1h55'
Adelantando y animado por los marchadores.

El único "pero" de un fin de semana estupendo. Este es el que más se ve, los otros 6 "peros" se reparten entre los dos pies... pues.

Dos campeonas, madre e hija.

-Platicos- para la casas.
Dori, 3ª clasificada absoluta y 2ª en su categoría. 2h25'.

Inma, Cele y Domingo. Haciendo camino.

Juanra y Cele. Un experto y una novel en la misma aventura.
2º -platico- en San José. Esta vez por 2º veterano.

Enhorabuena, especialmente a Jose Angel y su mujer Inma, a Pepe Montiel, a Miguel, a Maturana, a Ramón y a tantos otros conocidos que terminaron su prueba el pasado domingo.

Pasar días así, haciendo lo que te gusta y acompañado de la gente que aprecias, no tiene precio.

viernes, 4 de marzo de 2011

Caminante, no hay camino.

III TRAIL CABO DE GATA-NIJAR
Una sin bici, y lo que es mejor, en compañía.

Domingo 6 de marzo. 30 kms. Parque Natural Cabo de Gata. Almería.

Incompatibilidad, es una palabra a la que cada vez le encuentro menos sentido en esto del deporte.
 
Cabezo de la Jara.
Entrenar mientras caminas, para hacer Ironman??....

Las caminatas, esas que, más por necesidad que por gusto, hacía cuando quería salir de una lesión o de un "estado carencial" de fuerza y otras aptitudes físicas, se ha ido convirtiendo con los años en una afición que no me reporta más que satisfacciones.

Primera salida. Inazares.

Precisamente, ha sido en estos tres últimos años (los mejores con diferencia, deportivamente hablando) en los que más ocasiones he gastado zapatillas a base de largos pateos.

También es cierto, que aunque me va gustando, no soy capaz (si no es por esas causas necesarias y obligadas que antes mencionaba) de salir solo.

Suelo correr, pedalear y nadar en soledad, el 99% de las sesiones, casi siempre ha sido así, no es tanto un rechazo a la compañía como al placer del esfuerzo en solitario.
El Berro. Sierra Espuña.
Sin embargo, estos entrenamientos de resistencia, que cambio por cualquier sesión de las "normales" para un triatleta, las hago acompañando y acompañado de mi otra mitad.
El Berro. Sierra Espuña.
Tal y como hicimos hace dos años, el próximo domingo, si la salud quiere, participaremos en el Trail Cabo de Gata, y será un primer paso de cara a los 101 KMS de Ronda en 24 horas,  donde mi mujer, si nada bueno lo remedia, repetirá la experiencia de ser Cientunera (ya lo consiguió en 2009 con 18h30') y yo, intentaré por primera vez hacerlos corriendo de principio a fin.
Puerto Lumbreras-Aguilas.
Allá por el 31 de diciembre pasado, comenzamos el camino, primero en Inazares, luego por Peñas Blancas, Sierra Espuña, Cabezo de la Jara... y la última y más larga de todas, la caminata Puerto Lumbreras-Aguilas de hace unos días, que supuso la, nada desdeñable, cifra de 7 horas caminando.

Puerto Lumbreras-Aguilas.

...y es que, se hace camino al andar.