Para el título que propongo, tampoco desentonaría hablar hoy de globos terráqueos, u oculares... pero eso ya será en otras ocasiones.
El globo de feria pinchado.
Puede que ésa sea la definición más exacta que han hecho de mí como deportista en los últimos años. Y la tuvo que hacer uno de las personas que más conoce cómo funciona mi cuerpo.
Juanfra, aguanta durante todo el invierno la cansera de quien escribe, mientras le da masaje. Aquí el presente, como buen deportista, usa a su antojo la paciencia de Juanfra, como si de un cura se tratase y al que hubiese que confesar y llorar cada pequeña molestia generada por el entrenamiento.
El fisioterapeuta suele estar infravalorado, lo digo por experiencia y sobre todo porque si no se tiene costumbre, uno va al masaje... cuando algo le duele. Y no se entiende que es quizás una de las mejores inversiones en salud que uno pueda hacer, si coge como hábito una visita periódica al mismo.
La explicación es simple: invertir un dineral en una superbici para ganar unos segundos, cuando llevas un mes con una contractura en el sóleo, pues... es como el que tiene tos, y se rasca los dos...
Yo llevo muchísimos años ya (teniendo tos...:-D), tratando de no dejar nunca más de dos semanas si pasar por "boxes"... total... siempre hay algo que intentar arreglar.
A veces, el arreglo se basa más en lo emocional, en ése momento de tranquilidad donde uno no quiere relajar solo el cuerpo, sino también la mente y descarga sin preguntar al pobre fisio, todas sus inquietudes, dudas y hasta frustraciones... y otras veces, las que menos, también deja caer sus alegrías.
He tenido la suerte de conocer a varios, y todos buenos, en ambos aspectos, pero es cierto que llevo apenas tres años, donde "por culpa de" o "gracias a" el año que vivo partido entre dos poblaciones, en verano es Paco Albarracín de Aguilas, quien me soporta (a mí, a otros peores que yo (por pesados y quejicas), como P.M.Campoy.. :-) por ejemplo e incluso a alguna inglesa de esas que no andan ni para atrás, como Catriona Morrison o la tal Chrissie Wellington...).
Y el resto del año, y desde hace muchos, bastantes años ya, es Juanfra en mi pueblo, el encargado de solucionar lo que apenas tiene ya arreglo, da igual si hablamos de mi cuerpo o de mi cabeza.
A él en concreto, va dedicada la entrada y su definición de mí como ironman, no tiene desperdicio, que cada uno se la adjudique si quiere, porque no creo que sea sólo cosa mía.
Dice Juanfra, que yo soy como un globo de feria, que cada día se pincha por un lado distinto.
Él parchea un agujero, y al día siguiente lo hace el podólogo; a la semana, otro agujero lo tapa el biomecánico, y yo mismo, me voy poniendo parches en forma de nuevas zapatillas, de cambios de material, de alimentación, de entrenamiento.... y así vamos, parcheando al ironman, hasta que un día el globo reviente.
Joder Juanfra... no se puede decir que sea muy bonito lo que me has dicho, pero amigo, cuánta razón tienes.
La foto, en realidad no viene a cuento de la entrada, pero quería aprovechar, para mostrar cómo pasamos por aquí algún año que otro, el día de Nochebuena... corriendo, sudando y de corto (que no solo con terremotos solucionamos por aquí el aburrimiento).
2 comentarios:
FELICES FIESTAS
QUE DISFRUTES
Y QUE CONSIGAS LO QUE TE PROPONGAS EN LA MEDIDA QUE LUCHES POR CONSEGUIRLO.
UN SALUDO
Igualmente Jose Antonio.
Muchas gracias, como siempre y te deseo lo mismo.
Un saludo
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