viernes, 1 de abril de 2011

Aquel mes de marzo…

… que ayer terminó, me dejó mucho de eso que busco desde hace años, con estos vicios míos de deportes varios.

Haré repaso del mes,  pero lo primero sois vosotros, todos vosotros y algunos más. Llegar a 50.000 visitas en dos años con ése contador puesto, es algo que no solo me cuesta imaginar como sucede, sino que encima me da hasta vértigo. Hace un año pasaba las 20.000 y creo que dije lo mismo o al menos lo pensé.
Esta ventana sigue abierta para todo el que quiera asomarse, me alegro por quienes se entretengan y lo siento por quienes sientan haber perdido el tiempo. De la forma que sea, GRACIAS A TODOS.

Vamos allá con marzo.
A primeros corrí por un parque natural, el de Cabo de Gata, rodeado de familia y amigos.

Dos semanas más tarde, esa familia del norte,- familia y amigos que forman el grupo Urbiko, nos esperaban a Inma y a mí, con los brazos abiertos-.

Un fin de semana completo, emocionante y por supuesto, efímero… como siempre que vamos, el tiempo pasa demasiado rápido y cuando venimos a darnos cuenta, ya estamos de regreso.

Foto del equipo, reunión y cena para el primer día, el viernes 18.

Duatlón de Oñati para el día siguiente, un lugar al que me gustaría volver, no solo por terminar lo que empecé sino por volver a vivir un ambiente de esos que te ponen los pelos como escarpias, de esos que te hacen sentir hasta bueno… vayas en la posición que vayas… vaya que si volveré…

Y para rematar tres días de infarto, madrugón el domingo para aprovechar que el lesionado murciano, no corre pero pedalea… ¡ay va la ostia! ¡ pues ya que estás aquí, vamos todo el equipo a correr mañana la Bilbao-Bilbao, pues! ¡que salen 7000 y sin nosotros dicen que no se hace…:-D!
Comida con la familia numerosa, coche y nueve horas a 110 no más…

La consecuencia de las consecuencias.

El problema físico de aquel dorsal por tierras del norte, es una consecuencia que deriva en otra, no estar a estas horas en la charla técnica de Sueca. Mañana os echaré de menos.

Y estas consecuencias ya han derivado en otra, ha sido como un resorte, como un muelle oportuno o inoportuno según se mire… que salta cuando le da la gana y sobre todo, cuando algo me para.

Si sigo con la metáfora del montañero y su montaña, termino por contar una vez más, mi forma de hacer las cosas, mi ánimo de propuesta: si quiero subir aquella montaña, y me parece difícil tarea, dejo de mirarla y pensar demasiado en ella, miro la siguiente, la que está más allá.. quizás más difícil…quizás más alta. Así, ya no me parece tanto la que anhelo, ni por esfuerzo ni por espera.
Ya pienso en Sueca y en mí con 41 años, tampoco falta tanto.

Y que a nadie se le ocurra pensar en la palabar revancha, cuando hablo de seguir, de volver, de repetir, de encabezonarme... no es revancha con nada, es sencillamente, levantarse y volver a andar.

Mientras, tengo todo un año para seguir llevando... para que me siga acompañando ADICA, allá por donde vaya. Francia en junio será la cita... nada, ahí a doce semanas escasas...

Lento pero seguro.

Las zapatillas ya empiezan a acumular polvo desde ayer, muy muy lentamente, me duelen los huesos porque no sé correr tan despacio (tan despacio es acompañar a mi mujer que va andando). Pero también esto tiene su parte buena, pues así me voy haciendo a la idea de los ritmos de los 101 kms de Ronda en 24 horas, para dentro de 5 semanas.


Antes, vendrá mi última prueba de duatlón (atendiendo siempre a que la salud quiera). Será otra vez en Pais Vasco, en el Duatlon de Arrigorriaga, 12-75-12. Duro, bonito, exigente, bonito otra vez…

Campeonato de Euskadi de larga distancia que mi club organiza no solo con todo detalle, sino con el corazón, que es lo más importante. Si no me equivoco, será mi 7ª participación. El ánimo me lo dice: lo haré bien….

… ¿qué haré bien?: pues disfrutar, pues.

1 comentario:

Javi dijo...

Animo y nos vemos en Arrigorriaga, suerte en Ronda. Saludos.