martes, 3 de marzo de 2009

Javi I de Teguise.



Contaban las malas lenguas, que vivía por ahí un tipo tal, que su presencia asustaba y su mirada te helaba.
Hablaban de su esbelta figura y de su melena al viento, de su nariz puntiaguda y de su patilla alargada.

De tez morena, pintada por el sol canario, se murmuraba que los volcanes lo enviaron.

Sobre montura extraña de extrañas formas negras galopó durante años por tierras murcianas, alardeando figura, melena, de nariz y de patilla infinita.

Hablaron durante mucho tiempo del mucho tiempo que no se hablaba de él,
se preguntaron unos a otros qué habría sido del tipo aquel,
hasta se volvieron bífidas aquellas malas lenguas, y le dieron por finito
cuando lo vieron sin montura, cuando menguo su melena, cuando ya no era tan esbelta su figura.

Hoy le han visto cabalgar de nuevo y llamar a su corcel por nombre madone.
Le acaban de ver pasar, con casco giro negro, con gafas oakley blancas y de gris orca vestido.

Dicen que habla solo, que cuenta mil batallas, que lo vieron hace años y que ahora regresa, para ganarlas.
Javi I, nato de Teguise, allí donde el Ironman de los volcanes se multiplica por dos, allí donde lo fácil acaba y lo hermoso comienza.

Este tipo, Javi I de Teguise, ya no es uno, son tres y como el Ironman de su tierra, en el doblez que se encuentra, se multiplicará por ellos y por él, dará por terminado lo fácil y comenzará con lo hermoso, sin duda.

2 comentarios:

JAVI dijo...

Joder, eres un poeta, en dos palabras; IM-PRESIONANTE. Muchas gracias, me ha encantado.

ramón dijo...

...si...el poeta de la bicicleta...jajajaj

un abrazo