martes, 3 de febrero de 2009

DUATLON TORRE PACHECO 2009

COMO AGUA DE MAYO...EN ENERO.

Quien no me conozca pensará que voy a exagerar, quien me conozca…igual hasta lo confirma…

Sinceramente, no exagero si digo que estoy satisfecho con mi participación, después de tres años sin hacer un duatlón corto de carretera y cuatro sin disputar, se puede decir que lo he cogido por donde lo dejé, ni más ni menos, y eso, ya metido en 38 tacos, no es poco.

Y no exagero tampoco si digo que ésta vez me sabe mucho más, y que si bien le pudo parecer raro a la gente verme llegar exultante a la meta de Torre Pacheco, (que parecía más el ganador que no el octavo), lo que ellos no sabían era que en esos metros terminaba una “carrera” de dos meses y pico, donde la moral, los ánimos, el entusiasmo y en definitiva, la alegría, han brillado por su ausencia.

Al final, todo queda en nada y ya descanso, descanso de todo ése lio, de toda esa acumulación de insatisfacciones, ya descanso...

Por suerte para mí, lo que no se ausentaron por completo fueron las ganas, así que ésta vez, como siempre o más que nunca, la constancia me ha salvado.

Una constancia que no ha ido unida precisamente a superentrenamientos, ni siquiera a un orden de cargas y recuperaciones aceptable, pero que, valga la redundancia, ha sido constante. Los días de ganas entrenaba y los días sin ganas también, y ahora que lo pienso, me doy cuenta que precisamente esos entrenamientos en días que no apetecía, son los que más me han ayudado.

Terminé con elocuentes y exagerados gestos de alegría pues en cada uno de ellos me desprendía de la pesada carga con la que me iba hundiendo poco a poco.

La satisfacción llegó a ser prácticamente plena antes incluso de darse la salida, poder saludar, dar la mano e incluso abrazar a amigos que son más que amigos y que no veía desde hace tiempo, Huertas, Alfaraz , Fran, Alfonso, Jesús, y muchos otros, fue un gustazo.
En especial a Huertas, ya que diría que somos amigos desde siempre y para siempre y ahí sí que no estaría exagerando ni una coma.
La última vez que lo ví, rodaba junto a él en la maratón del Ironman de Lanzarote de 2007, yo a punto de terminar, a él le quedaban aún 12 kms y era él el que me animaba…

Si coges a una tortuga y le escayolas las patas, corre más que yo; lo que me alegro ahora de que mi padre no me comprara un Vespino cuando tenía 14 años y sí una bici, en Torre Pacheco tuve mi pequeño y particular premio de ser el primero en el sector de ciclismo, lo cual, a la reina y a mí, nos llena de orgullo y satisfacción…


La próxima será otro cantar, pero lo que sí es cierto es que por lo menos ahora, me he quedao tranquilito, tranquilito...ssssssssss.

2 comentarios:

JAVI dijo...

Vaya carreron te salio maquina, que pena no poder estar contigo, te hubiera puesto als cosas dificiles para que fueras 9, jajajaja. Me alegro que estes otra vez ahí dand caña.
Un abrazo.

ramón dijo...

Hombre Javi, me alegro de leerte, gracias por todo.
Hasta el ultimo momento pensé que estarías por allí, viendo o corriendo, incluso me llevé una cosilla en la mochila para tí, es una tontería eh, no te hagas ilusiones...jajaja.
oye, lo de hacer el 9...eso habría que verlo...jajajaj.
Oye, te mando mi correo y me contestas que no tengo el tuyo, ok?
r.a.m.o.n.@.trimurcia.org
(sin puntos eh?)
Por cierto, como va el chiquitin? estarás que no meas cabroncete...

un abrazo